EL SANTITO
Folio nº 2 de 4 custodiados en La Fundación Mediterráneo. La Llum.
Obra conseguida gracias a La Fundación Mediterráneo. La Llum. Es el boceto de un Juguete Cómico Lírico. Podemos considerar esta obra como perteneciente a su Etapa de Crítica Religiosa. Sería su obra en solitario número 111.
Es un chiquillo de 15 años, sobrino de un cura viejo y muy bueno e inocentón que vive con una hermana suya vieja muy desconfiada. El cura le quiere hacer sacerdote. El chico, hipócritamente, finge una vocación que no tiene. Aparece como un santito y en el fondo es un chiquillo travieso, que fuma, tiene muchas novias, bebe, y es malísimo pero de gran corazón. La culpa de todo lo que hace se la echa a un zanganote hijo del médico de un pueblo inmediato que vive con el sacerdote estudiando latín.
Al final se descubre todo.
Números de música. El primer cigarro. Se marean.
El de la jaula cuando sueltan al pajarito.
El de la instrucción militar para la pelea a pedradas contra los chicos de otro barrio.
Terceto en el que obliga al zanganote a ligar con una chica porque es amiga de su novia. Como ninguno se decide, él los obliga a la fuerza.
El santito le da al zanganote postales de desnudos para que se las guarde; además le da un libro de cuentos verdes, una onda, una tirada de pájaros; cartas de novios…
Cuando el zanganote se quita la chaqueta y se pone la blusa para que no se manche, le registran y le encuentran todo eso. El cura le mira condenador.
Hablan de chicas:
-¿Te gustaría a ti una alta rubia?
-¿Rubia?… No es mi pelo…, pero… ¿cómo está de carnes?
-Maja… en Madrid.
Obligando a ligar:
-¡Pero si es amigo mío!…
-Bueno, será amigo tuyo, pero a mí no me gusta…porque tiene las narices muy pequeñas…
-Mira que por un poco más ni menos de nariz dejar una perfección como esta…
Va a dar la lección con la chuleta dentro de la gorra.
El cura le obliga a ponerse la gorra y ya no dice nada de la lección.
Magdalena, es la chica en cuestión en la obra, tuvo un novio muy fuerte. Ahora se pelean el fuertote, el santito y el zanganote.
PLAN POR ESCENAS
1ª.- Cura tomando chocolate y tomando la lección al chico.
2ª.- Sale el ama, hablan de lo aplicado que es el santito; del temor de que lo corrompa el joven que llegó anoche; de que si lo pondrán en otro cuarto; de sus esperanzas de verlo cura y oírlo cantar misa; acaban besándolo y abrumándolo, y haciéndole advertencias para que no se contamine de los pecados del otro si los tuviera… El cura dice que sí los tendrá en el alma… porque es un poco calaverilla.
3ª.- El cura los deja estudiando y se va. El ama también se va.
4ª.- Quedan los dos solos. Se expansiona el santito; le da a guardar las cartas; cantan el número de música; le cuenta lo de las novias que tiene y el apuro en el que se haya… El santito le cuenta que tenía relaciones con una chica del pueblo, pero luego vio a otra, a la hija del campanero, y que le gustó más, y que a pesar de tener novio, el hijo del mayoral de la diligencia, se la quitó. El hijo del mayoral le declaró la guerra y van a tener una pedrada aquella tarde y han convenido que el que gane se lleva a la chica. Pero lo terrible es que la novia abandonada ha ido con el soplo al Campanero y le han registrado y le han cogido las cartas y se lo van a decir al cura. El santito le dice al otro que ha firmado las cartas con su nombre; el otro se aterra.
MENSAJES DE ARNICHES
MENSAJE NÚMERO 1184: Al igual que hizo en la obra “La carne flaca”- 1908-, en este boceto vuelve sobre el tema. Además de que “el santito”, no tiene vocación, es que es un tipo perverso donde los haya. No hay que forzar las vocaciones…, si tienen que llegar, llegarán.
MENSAJE NÚMERO 1185: También se realiza la denuncia de lo rápido que se juzga a las personas sin conocerlas de veras. En este caso, el hijo del médico viene con fama de calaverilla, y ya tenían al zorro dentro del gallinero.