LA PRINCESA TARAMBANA
O
LA SÁTIRA DE LA POLÍTICA
Francisco Alonso. La película.
El 25 de abril de 1931, ya iniciada la segunda República, se estrena esta opereta bufa en dos actos y cinco cuadros, escrita por Carlos Arniches y Joaquín Abati, con música del gran Maestro Francisco Alonso. Interpretamos que toda la obra es una crítica, primero, a la dictadura de Primo de Rivera, y a la del General Berenguer a continuación.
Precisamente podemos conocer el contenido del libreto gracias al nieto del maestro, Francisco Valencia Alonso, responsable de la página web que atesora la historia y documentación de tan ilustre compositor granadino: https://www.maestroalonso.com/, y que nos ha facilitado la copia guardada en la SGAE (81)
Pertenece esta obra a su Etapa Política. Tras la primera representación, la excesiva acidez política obliga a los libretistas a eliminar ciertas frases y chistes que hemos puesto subrayados.
Así mismo contamos con la copia mecanografiada guardada en la Fundación Mediterráneo. La Llum. Centro de Documentación, Investigación e Innovación educativa (82). Lo primero que vemos al estudiar esta documentación, es que Carlos Arniches había escrito dos obras una titulada “La Venus salvaje”, haciendo referencia a Fieralina, naturalmente, y otra “La victoria de Melanio”, siendo éste el actual General Pirandón. Era un título sarcástico, ya que este general pierde la batalla como veremos a lo largo de esta descripción. Y además viene una segunda versión ya prácticamente igual que la definitiva con ligeras diferencias.
La victoria de Melanio, comienza igual que la obra definitiva, cambian algunos nombres con los que han ido consiguiendo dar más gracia a la zarzuela. En esta obra en vez de luchar contra los Tarambanos, pelean contra los Rodenios. El Emir Trileón Segundo, pasará a ser el Emir Carcamalio XV duplicado; el Capitán Pinturio será Minarete; la hija del general se llama Idamé y después será Novaya. Sobre esta primera copia, Arniches va escribiendo las modificaciones que se llevarán al texto definitivo; por ejemplo, el Ministro de la Gobernación, luego será el de Comadreo; la hija del General Katiza es Zulika y luego será Fieralina.
El primer acto nos muestra en su primer cuadro un gran patio de entrada al palacio del General Pirandón. Estilo oriental. Al fondo se ve la plaza de una ciudad. Muro Almenado cerrando el patio. En una de sus almenas se ve una escalerilla.
Según se levanta el telón se escucha una marcha bélica, disparos de cañón y rumor de una multitud. Empieza a amanecer. Bobalín, mayordomo de Palacio calma a la multitud anunciando que va a salir un ministro del emir para dar noticias.
(Acto I, Cuadro I, Escena I.)
BOBALÍN.- Pues ahora saldrá un ministro del Emir a dirigiros la palabra.
VOZ.- A un ministro no se le puede exigir noticias muy verdaderas, pero en fin…
Mensaje número 845: No ha tardado mucho Arniches en meterse con los señores Ministros. “A un ministro no se le puede exigir noticias muy verdaderas”. Así comienza la obra.
Sale Reditonio, ministro de Trampas y Monopolios, empujado por su hijo Ibrahim y Novaya, para dar el discurso. Se oye una voz que grita: “¡Callad, que va a hablar el tramposo!”
DISCURSOS DE ARNICHES NÚMERO 26.
(Acto I, Cuadro I, Escena II.)
REDITONIO.- ¡Ciudadanos! No dudaréis que para mi la patria es una papa… (Se oyen rumores.)
IBRAHIM.- ¿Qué dices padre?…
REDITONIO.- Aguarda, que con los cañonazos estoy que no pronuncio (Al pueblo, muy deprisa.), que la patria es una papa… una papalabra sagrada. No ignoráis tampoco, que esta heroica nación de Trifonia, necesitaba entrar por el camino del progreso a galope tendido… (Voces en el pueblo.)
VOZ.- ¡Más despacio!
IBRAHIM.- Que no corras tanto.
REDITONIO.- Bueno… al trote largo. Para ello, teníamos que incorporar a la civilización un hecho glorioso y no se nos ocurrió otra cosa, que declararles la guerra a nuestros vecinos los Tarambanos, con el honrado propósito de quitarles un par de provincias de su territorio. (Bravos, aplausos, ovación.) Porque la nación que no le quita nada a otra no es una nación respetable ni digna, porque la nación que no puede figurar decorosamente en las conferencias de Ginebra, es una nación que se tambalea. (Aplausos.) Y a estas horas nuestro héroe nacional el napoleónico Pirandón, puede que no haya dejado un enemigo con cabeza en la orilla del Río Jano donde se celebra la batalla.(Suena un cañonazo tan fuerte que del susto se cae de la escalerilla.)
NOVAYA.- ¡Qué cerca suenan los cañonazos!
REDITONIO.- (Se repone y sigue de nuevo.) …no caca… caigamos el el lugar común de creer que somos inven… ven… invencibles. No. Pero no caigamos… No caigamos tampoco la… (Siguen los cañonazos.) porque hay que tener valor…
IBRAHIM.- Valor y equilibrio papá.
REDITONIO.- Y yo os digo que estamos seguros… (Cañonazo.), que estamos seguros… (Aparte a Ibrahim.) Oye ¿estamos seguros?
IBRAHIM.- No sé que te diga.
NOVAYA.- La batalla debe estar en su momento más encarnizado.
IBRAHIM.- ¡Las granadas estallan a menos de un kilómetro…! Pero que no te noten el miedo papá…
REDITONIO.- No tenten… tengas cuidado. (Al pueblo.) Pu… pu…pues bien… pue pue… pueblo heroico… ¡Atiza!
IBRAHIM.- ¿Qué pasa?
REDITONIO.- Nada… que con tanto cañonazo se conoce que el pueblo heroico ha sentido la necesidad de refugiarse en los kioscos subterráneos de… de ahí cerca.
Mensaje número 846: La Convención de Ginebra está formada, para los autores, por naciones “dignas”, y para ser considerada como tal, se debe conquistar algo de una nación vecina. (Se ha subrayado lo que se eliminó para la segunda representación.) Esa parte se añadió sobre el original discurso en la obra “La victoria de Melanio”.
Bobalín entra con la noticia de la victoria sobre los Tarambanos. Todos gritan: “¡Victoria!”. Victoria del padre de Novaya, el general Pirandón, que llevaba 107 batallas perdidas en nueve años.
El Emir Carcamalio XV Duplicado (porque tiene un hermano gemelo) no daba crédito, y ha pedido a Pirandón que regrese con los prisioneros y el botín de guerra. El Emir en persona vendrá a esta casa a esperar a Pirandón. Reditonio, ahora, piensa que Ibrahim se puede casar con Novaya, porque es hija de un general triunfador. Piensa que Pirandón es un “portamonedas abierto” y que le relanzará en su carrera política.
Justo antes de ir a ver al Emir, le comenta a Ibrahim y a Novaya que no se opone a su relación y que pueden abrazarse. Estos estallan de alegría. Bobalín pone en conocimiento de Novaya la terrible situación de pobreza de su padre, ha empeñado hasta su espada de empuñadura de oro y brillantes… ¡y las papeletas han caducado! Incluso la madre de Novaya está en el Harén y la van a subastar. El propio Bobalín tiene una papeleta para pujar.
Ibrahim viene corriendo a avisar de que la comitiva del general Pirandón está llegando. Pirandón y su ayudante Minarete vienen en moto con sidecar. (Llevan coronas en la cabeza, en los brazos, en todas partes, van hundidos literalmente de coronas de hojas de laurel.) Se sacuden las hojas de laurel como quien se sacude el polvo. Novaya le recibe con un efusivo abrazo.
CHISTES DE ARNICHES NÚMERO 418.
(Acto I, Cuadro I, Escena VI.)
NOVAYA.- ¡Ay papá de mi alma!… ¡Tú vencedor! ¿Quién iba a figurárselo?
PIRANDÓN.- Ya ves hija. Yo soy el primer sorprendido. Pero nada, como dice le refrán, “a cada puerco…”
REDITONIO.- ¡Por Dios mi General que ese refrán no es para héroes!
PIRANDÓN.- Ay sí es verdad… bueno quiero decir que no os abruméis con vuestras aclamaciones. ¡No es para tanto! Ha sido una victorieja vulgar! Cuatro detonacionejas, dos asaltillos, seis mil bajillas, doce mil prisionerejos… ¡nada!
Lleva toda la pechera de condecoraciones y cruces, y la espalda también. Cuenta como el General Katiza le esperaba en el río Jano, y cómo él les ha dado un quiebro, estrategia aprendida en España, y le ha cogido desprevenido por detrás. Ellos se han traído solo las prisioneras. Minarete las sorprendió en el río desnudas. Pero una huyó en su caballo por lo que Minarete la persiguió en moto, alcanzándola y metiéndola en el sidecar. Era Fieralina y se ha enamorado de ella
Pirandón se las quiere quedar para poder tener algo que regalar a los Ministros en caso de cambio de gobierno. Minarete quiere quedarse con Fieralina pero Pirandón no lo permite, y además le amenaza con meterle un consejo sumarísimo.
Minarete promete quitársela porque ella le ama. Además es hija del General Katiza: – “Es una fierecilla: sus palabras erosionan, cuando acaricia araña, cuando besa muerde. Te dice buenos días y te hace un chichón, no os digo más”- se explica Pirandón.
Las traen para que puedan ver a las prisioneras.
Cuando se presenta Fieralina, golpea al general, saca una daga e intenta matarle sin conseguirlo. Pero cuando Minarete le llama, ella se porta sumisamente ante el asombro de todos. Fieralina reconoce que ama a Minarete. Pirandón la manda encerrar en los sótanos.
Manda retirarse a todos porque quiere quedarse con sus familiares. Se vuelve a abrazar con su hija y se da cuenta de la presencia de Ibrahim, por lo que les interroga sobre su posible boda y el permiso o no de Reditonio.
(Acto I, Cuadro I, Escena VIII.)
IBRAHIM.- Algo hay de eso. Pero además (Con misterio.) tiene planes políticos (Por Reditonio.)
PIRANDÓN.- ¿De izquierdas o de derechas?
IBRAHIM.- Centrista. Del bolsillo nada más. Ya le conocéis.
PIRANDÓN.- ¿Y qué pretende?
IBRAHIM.- Que le hagáis una leve indicación al Emir… (Acción de cortar la cabeza.)
PIRANDÓN.- ¿El rebaneo?… ¿Para ocupar tu padre el trono?
Mensaje número 847: En el paralelismo que Arniches está haciendo con la política española nos indica las intrigas que se estaban dando para cargarse al cabeza de gobierno, como una práctica habitual. (El diálogo subrayado fue eliminado para la segunda representación.) (No figuraba en la primera versión.)
Inicialmente Pirandón se niega, pero después de ver que tiene prisioneros ingleses, en casao de que saliera mal el complot contra el Emir, podría huir a Inglaterra y canjearlos por su libertad.
Pirandón le cuenta a Bobalín que no piensa hacer nada de lo dicho, incluso que cuando haya roto todos los pagarés de Reditonio, le delatará al Emir para que lo mate a palos.
BOBALÍN.- Veo que la victoria te ha hecho hasta político.
PIRANDÓN.- ¡Y que he practicado en España! Verás que manos de golpes le arrean y que ahora dan con porra.
Nueva referencia ácida a la corrupción política en España. La frase subrayada fue eliminada. Tampoco figuraba en la versión de La victoria de Melanio, ni en la segunda versión.
Llega Reditonio con quien cierra el acuerdo y después el Emir Carcamalio XV Duplicado. Deciden ocultar a Novaya para que no sea un capricho más del Emir.
El Emir hace que se levante Pirandón porque –los héroes no se humillan-, le dice. Le va preguntando por la batalla, los prisioneros etc. Lo aparta y le pregunta si de verdad ha ganado, por que está harto de sus generales que siempre le mienten.
CHISTES DE ARNICHES NÚMERO 419.
(Acto I, Cuadro I, Escena IX.)
PIRANDÓN.- ¡Alteza! ¿Cuándo he cometido yo esa bajeza?
EMIR.- Siempre. Pero en fin esta vez el triunfo es seguro, ¿no?
El Emir quiere premiar a Pirandón con la más alta condecoración de Trifonia. Quiere que su hija sea su diecisieteava esposa. Pirandón intenta oponerse sin conseguirlo. El Emir se va pensando que le está haciendo el honor de su vida.
Quedan todos horrorizados. Están buscando una solución…cuando llega Minarete con una idea. Cuando el Emir mande por Novaya, que vaya otra mujer en su lugar. Deciden que sea Fieralina, la cautiva. Además ya lo sabe y ha accedido. Saben que el Emir es impotente. Pirandón está que arde contra Minarete pero no tiene más remedio que reconocer que esa una idea brillante para su hija.
Viene Fieralina y lo confirma. Entonces el sacerdote Beatulio anuncia la embarcación que viene a por la “hija” de Pirandón y se termina el cuadro I.
El segundo Cuadro solo es música de los balandros.
El tercer cuadro representa la popa de la Fragata “La Bella Sirena”. El Eunuco le pide a Pirandón que entregue a su hija, pero el prefiere entregárselo al Comandante de la fragata. ¡Le llaman y resulta ser Minarete! Ha cambiado de cuerpo para no tener que obedecer más a Pirandón. Suben a Fieralina a la embarcación. Minarete da órdenes a diestro y siniestro y se baja el telón.
El segundo Acto nos muestra el interior de Harén del Emir. Es un salón magnífico de estilo oriental con sofás, cojines, grandes cortinas, pebeteros…
En la versión original es de estilo europeo moderno con cuadros de toros. Arniches pretendía con los uniformes de soldados de europa y con los decorados hacer una llamada al espectador para que se diese cuenta, que aunque la trama era “oriental”, la historia era de su propio país, y las críticas que se hacían se referían a la ahora recientemente extinta “dictablanda” (83).
En la primera escena se escucha una canción oriental. Están Dolores y Kobea, odaliscas del Emir jugando al tute, juego que les ha traido de Europa el General Pirandón. Kobea canta las cuarenta. Le dice Dolores que está cantando más que Marcos Redondo, que fue un barítono nacido en Córdoba, con muchísimo éxito en la Zarzuela.
En la primera versión había ideado una Jazz Band formada por negros, supongo que para que el maestro Alonso se luciera como en Coplas de Ronda.
En la segunda escena traen a bañar a la nueva esposa del general. Kapolio el eunuco jefe, le explica que, según la Constitución de Trifonia, no puede tener contacto con el Emir hasta pasado el baño sagrado.
(Acto II, Cuadro I, Escena II.)
FIERALINA.- ¡Ah!, pero aquí ¿hay Constitución todavía?
KAPOLIO.- ¡Ya lo creo!
FIERALINA.- ¡Caramba, pues que sea enhorabuena!
Mensaje número 848: Nueva alusión a la política y a la vigencia de la Constitución. La sorpresa de Fieralina nos indica la sorpresa de los creadores del libreto.
En la siguiente escena Kapolio se queja del trabajo que dan las odaliscas, y ahora una nueva esposa para nada, porque él no puede…, -¡si uno pudiera ayudarle!…-, se lamenta. Pues bien todo ese monólogo quedó eliminado, esta vez parece que por demasiado erótico.
Salen las odaliscas asustadas tras las cortinas en las que estaba la piscina del baño sagrado. Hay un hombre -de los verdaderos- dice Dolores, dentro del Harén
CHISTES DE ARNICHES NÚMERO 420.
(Acto II, Cuadro I, Escena IV.)
KOBEA.- ¡Ay, que miedo!
DOLORES.- ¡Ay que miedo… que se haya ido!
KOBEA.- No, no se ha ido… está ahí… Mira que guapo.
KAPOLIO.- ¡Pero ignora ese desgraciado que si le pillan aquí dentro, está expuesto a que lo eunuqueen?
Este diálogo, sin embargo, se mantuvo. El joven era, naturalmente Minarete vestido de Comandante de Fragata, que además es amigo de la infancia de Kapolio. Se abrazan y Kapolio le cuenta, avergonzado, su historia. Se casó y estableció en Takaramaña, se dedicaban a “la recoba”. Su suegra, que vivía con ellos le dio un golpe en los genitales y lo dejó eunuco. Emigró a España.
En la versión de La Venus salvaje, cuenta simplemente que por desavenencias con su suegra se va a España, allí vende “La Voz” y se entera del puesto de Eunuco, y lo que hace es disimular la voz, colocarla aflautada. Esto también nos congratula ya que se había “retorcido” la historia en demasía, y no parecía de Carlos Arniches.
HISTORIAS DE ARNICHES NÚMERO 151.
(Acto II, Cuadro I, Escena V.)
KAPOLIO.- Tuve que huir de aquél hogar vandálico y emigré a España, en aquél hermoso país me enteré que habían salido a concurso veinte plazas de eunucos y me fui al Instituto Reus, pero allí no preparaban para eso. Me volví aquí, me presenté a concurso, y el número uno sin recomendaciones.
MINARETE.- Pues chico…, chica…, es decir… te acompaño en el sentimiento… es decir…
KAPOLIO.- Ya ves, hijo, _____________________ . ¿Y a ti qué te pasa para haber hecho esta locura de estar aquí?
Lo subrayado fue eliminado, pero además, tachado, y hay una parte de la contestación que no hemos podido leer. Semejante chiste de mal gusto no lo hemos encontrado entre los 247 folios que hemos estudiado de los diferentes borradores de Carlos Arniches.
Minarete le cuenta que está enamorado de la nueva esposa del Emir. Le pide ver a Fieralina o bien le amenaza con automutilarse.
En la escena VI salen del baño cuatro favoritas y Fieralina. Dolores y Kobea las acompañan. A continuación reproducimos un texto tachado.
(Salen de entre las cortinas las cuatro favoritas y Fieralina. Van todo lo desnudas que sea posible, sigue a cada una de las cuatro favoritas una esclava con una sábana extendida en alto. Detrás de Fieralina viene una sábana que parece que anda sola, pues no se ve a quien la sostiene. Las favoritas vanse por los laterales seguidas por las esclavas.)
Suponemos que para la segunda representación, esta escena finaliza de forma más breve y menos insinuante.
Fieralina, así y todo, ordena a su “esclava” que la seque. Entonces se ve que es Minarete con peluca rubia de largos tirabuzones que le ocultan parte del rostro. La envuelve el cuerpo con la sábana y queda abrazado a ella.
CHISTES DE ARNICHES NÚMERO 421.
(Acto II, Cuadro I, Escena VII.)
FIERALINA.- ¡Minarete! ¿Tú?
MINARETE.- ¡Yo!
FIERALINA.- ¿Pero qué papel desempeñas aquí?
MINARETE.- Papel secante.
FIERALINA.- Bueno, y ahora dime. ¿Cómo has podido estar aquí?
MINARETE.- Favorecido por el Jefe de los Eunucos. Soy compañero suyo.
FIERALINA.- (Asustada.) ¡¡Compañero!! ¡¿Entonces tú tampoco?!
MINARTE.- ¡No, por los dioses! No te alarmes. He querido decir que soy amigo, conocido, vamos… En lo demás hay entre los dos una respetable diferencia.
FIERALINA.- ¡Ay, que susto me había dado!…
Todo lo subrayado se eliminó.
Minarete le cuenta que a quien teme no es al Emir, al que califica de “frigidaire de gran espectáculo”, al que teme es a Pirandón.
La palabra “frigidaire” significa refrigerador en francés, que se pronuncia “frisider”, nombre que hemos dado algunos desde pequeños al frigorífico.
Fieralina en un diálogo amoroso le propone que cambie la marina por la caballería. Ella le pediría al Emir que le hiciera Capitán de su Guardia Personal, y así podrían estar juntos en Palacio. Se esconde Fieralina porque vienen Kapolio y Pirandón. Minarete, disfrazado de odalisca, escuchará su conversación. Se despiden y cuando se aleja Minarete exclama: “¡Hasta ahora no sabía yo, porque gustan tanto las Tarambanas …!” que también se eliminó.
Pirandón interroga a Kapolio por las nuevas adquisiciones del Harem. Le explica que lleva 9 meses de campaña…
CHISTES DE ARNICHES NÚMERO 422.
(Acto II, Cuadro I, Escena VIII.)
KAPOLIO.- ¡Os veo tan frenético, como humeante, General!
PIRANDÓN.- Y dime, ¡ porque estoy que mujo!… ¿No tendrías siquiera una esclava nubia que prestarme?
Lo subrayado se eliminó.
KAPOLIO.- Sí; yo tenía una novia, pero regañamos y podría decírselo al Emir
PIRANDÓN.- No me importa. Pienso aconsejarle a Karkamalio que puesto que no utiliza el harem debe abrirlo al turismo…
KAPOLIO.- ¡No es mala idea!
Aparece el nombre Karkamalio escrita con “k”.
Kapolio se va a comunicar al Emir la petición de Pirandón y él se queda lanzándonos este monólogo.
(Acto II, Cuadro I, Escena IX.)
PIRANDÓN.- ¡Dioses próvidos… Si siquiera encontrase yo entre las castañas (Refiriéndose a las odaliscas de pelo castaño.) una que poder asar con el fuego que se desprende de mi deseo…! ¡Ah cuántas cuántas calentitas, cuántas… en sus lechos virgíneos estarán soñando con el amor… y yo aquí…destartalado, flácido, humeante, me muero de nostalgia… ¡Ah digo no, oh, antes he hecho ahí!…¡Oh Minarete, tu me has quitado a Fieralina, pero te juro que te pudrirás en el destierro…!
Lo subrayado se eliminó.
Minarete lo ha oído todo. Comienza a despotricar de Pirandón cuando de nuevo aparece en escena y le ve. Le confunde con una odalisca. Le da como su nombre Naftalina, originaria de Tarambaina que está en Pisulanucia que pertenece a las islas Gorgonias donde se habla el Chulinidio; ella era pastorcilla en las faldas de los montes Columbios, y que se ha subido muchas veces las faldas…, a lo que Pirandón le comenta que siga, que siga haciéndolo…
MINARETE.- Trepando de roca en roca, con la ligereza del cervatillo cabrio.
PIRANDÓN.- ¡Oh lo comprendo! Eres esbelta como la palma del Desierto Siridinio, y rubia y menuda como la hoja del Tococorocú. (Aparte.) A mí no me ganas en camelos. (A Naftalina.) Oye, gitanuela.
MINARETE.- Señor…
PIRANDÓN.- ¿Me das un besaceo?
MINARETE.- ¡Miau…! (Le vuelve a atascar la pipa.)
PIRANDÓN.- Que no me la atasques que no tira… Ven aquí que me enamoras. Eres menudita, linda, breve… ¡Bésame!
MINARETE.- ¡Ay, no por los dioses, que soy virgínea!
PIRANDÓN.- Y yo espontáneo… ¡conque toma! (Se lo da.)
MINARETE.- (Le da una bofetada.) ¡Corruptor! (Le da un metido.)
VOZ.- ¡Va!
PIRANDÓN.- Un café con árnica… ¡Mi madre!…(Con las manos en la cara.) ¡Pero no importa; me la llevaré! Estoy que echo chispas. (Se va haciendo una humareda enorme con la pipa.)
Todo lo subrayado se eliminó.
Desaparecen ambos de la escena y llegan las odaliscas hablando sobre el Harem con Fieralina. El Emir las viste en París, las calza en Londres y no tienen nada de trabajo, como que Dolores les ha prometido que se van a sindicar para al menos tener 8 horas de trabajo. Se consideran obreras del Harem.
Dolores es de Madrid, de la calle Sombrerete 7. Cuenta la historia del General Pirandón en Madrid y el encuentro con su padre. Hicieron amistad y le mandaron a ella a Trifonia. Cuando comienza a recordar las verbenas de Madrid, aparece Pirandón.
Pirandón recuerda el chotis de los Pitos del Santo y bailan con un organillo el número de la Verbena Madrileña.
Otra odalisca, llamada Kety Fox, dice que los bailes de su país son más elegantes; ella es de Washington.
Se van todos y viene el Emir con Minarete vestido de Marino. El Emir le concede el rango de Capitán de su Guardia Real, que es un cargo sin sueldo. Le pregunta popr su nueva esposa. De todas formas le confiesa el Emir que se encuentra no enfermo pero sí indiferente, insensible, marmóreo… con las mujeres.
(Acto II, Cuadro I, Escena XI.)
MINARETE.- ¿Y esa marmoreidad, a qué obedece?…
EMIR.- Las vulgaridades del amor, me hastían. ¡Siempre los mismos procedimientos, formularios, como recetas de un libro de cocina!… Para una hora de felicidad, tómense dos cucharadas de pasión, un poco de deseo, mézclese con un puñadito de ternura, échese, agítese… ¡Nada!… Siempre la misma receta.
Lo subrayado se eliminó. También estaba en el original.
Le asegura que su nueva esposa -será simplemente honoraria-, dice el Emir. Le cuenta que tiene un carácter indomable, y según se lo describe, se va emocionando el Emir cada vez más. Le despide a Minarete y se queda solo en el Harem.
Se va a aplicar la Voronofina Virilis, vamos, lo que ahora llamaríamos Viagra.
Mensaje número 849: Interesante adelanto de 90 años en la aparición de una medicación que ya se buscaba entonces. Arniches estaba al cabo de la actualidad de los intereses de la ciencia.
Se da la esencia en las muñecas, en las sienes, en la cara…y llega Pirandón. Le recomienda que aleje a la juventud del reino para que no le hagan competencia. Le parece muy bien.
En ese momento llega Minarete vestido de Capitán de la Guardia Real.(Con un vistoso uniforme de caballería. Lleva por insignias, grandes herraduras y unas enormes espuelas y un sable descomunal.)
Pirandón le comunica que ya no se podrán ejercer cargos en Palacio antes de haber cumplido los 60 años de edad. Le nombran Ambulante de Correos para que esté viajando.
(Acto II, Cuadro I, Escena XIII.)
MINARETE.- ¿Pero cómo va el Emir a enamorarse de una mujer cono vuestra hija, que tiene ese genio?
PIRANDÓN.- Sí, es algo arisquilla, no puedo negarlo. Si se la hostiga, da arañacitos y a veces cuando se la besa, mete un alfilerito… ¡pero con una meti… culosidad que entusiasma!
EMIR.- (Con satisfacción) ¿Pero también perfora?
PIRANDÓN.- Donde ve molla se ceba.
EMIR.- (Aparte.) Qué delicia… Estoy desando verla.(Se da la Voronofina.)
PIRANDÓN.- Y ahí lo tienes, se frota de gusto.
MINARETE.- Este canalla me la juega.
PIRANDÓN.- Y a propósito de caba… Ahora que estamos aquí los dos, en confianza… con permiso de la caballería…, yo quisiera pediros otro favor, Alteza.
EMIR.- Cuanto anheles…
PIRANDÓN.- Pues que deso despedirme de mi hija antes de que ingrese en el harem.
Todo lo subrayado se eliminó. También estaba en el original.
Minarete tiembla ante la farsa de Pirandón.
Kapolio sale y recibe la orden de traer a la “hija” de Pirandón, y éste se la come literalmente a besos ante el horror de Minarete. Fieralina se resiste sin llamar mucho la atención. La besa hasta en los hombros, – un padre no repara-, dice Pirandón.
CHISTES DE ARNICHES NÚMERO 423.
(Acto II, Cuadro I, Escena XIV.)
MINARETE.- ¡Que se la come, Alteza!
EMIR.- Y a ti te sienta mal según parece.
MINARETE.- ¿Cómo me va a sentar mal si es él sólo quien se la está comiendo?
EMIR.- Bueno, ¿te has despedido ya?
PIRANDÓN.- Me falta la parte recordatoria. Ven acá palomita. ¿Quién te cogía así de niña y te levantaba en vilo y te cantaba “aúpa cielito que pesas poquito”? ¿Quién te daba azotes cariñosos así…? (Se los da.)
FIERALINA.- (Ya desesperada y con fiereza.) ¿Y quién te cogía ati de los pelitos y te tiraba así? (Le tira de los pelos.), ¿y te estrujaba así? (Lo zarandea.)
PIRANDÓN.- ¡Oye eso no, que son recuerdos que quitan la cabeza!
MINARETE.- (¡Dale fuerte!)
FIERALINA.- (Aparte.) ¡Ahora verás canalla! (Alto.) ¡Ah, señor, dulces son estos recuerdos! Pero y aquellos de cuando yo niña todavía, jugaba entre los rosales de nuestro jardín, con Minarete mi compañero de infancia. ¿Te acuerdas Minarete?
MINARETE.- (Apartando bruscamente a Pirandón y abrazándola.) ¡Ah, que si me acuerdo!
FIERALINA.- Éramos dos niños inocentes… ¿Recuerdas los besos que nos dábamos?
MINARETE.- Yo a ti… tú a mí… yo a ti…(No paran de besarse.)
FIERALINA.- Déjame señor que me despida de él también… (Sigue besándole.)
PIRANDÓN.- (Aparte.) ¡Me la han jugado, de puño!
Lo subrayado se eliminó y también estaba en el original.
El Emir pone fin a tanto beso y se queda solo con Fieralina. Le ofrece caramelos y vemos el número musical de los caramelos.
El Emir se va emocionando y la coge en sus brazos ante la oposición de Fierlina. Según le pega Fieralina, el Emir está más feliz. (Le tira toda clase de objetos a la cabeza donde iban los muebles, produciendo un estrépito horroroso. Por último de un empellón le arroja arañado y maltrecho sobre un diván y huye.)
Entran Pirandón, Minarete y Kapolio ante el estrépito. El Emir le cuenta a Pirandón, que la paliza recibida le ha rejuvenecido de una forma increíble, que ahora puede asegurar que esta mujer –“¡será la madre del heredero del trono de Trifonia!”-.
Pirandón se ríe de Minarete y el Emir pide que la encuentren y se la traigan y finaliza el primer cuadro.
El segundo cuadro es un interior de Palacio del Emir. Hay un estrado con un trono y varios asientos para los dignatarios de la corte. Es de día.
Ibrahim y Novaya preguntan a Reditonio si el plan de suplantación había tenido éxito. Reditonio les cuenta que sí. Como sienten que viene el Emir, se ocultan.
(Acto II, Cuadro II, Escena II.)
PIRANDÓN.- ¡Calmaos, señor, calmaos!
EMIR.- ¡Cómo que calmaos!… Yo ya no me calmo hasta que aparezca tu hija. Y como no aparezca, le pego fuego al Palacio, degüello a todos sus servidores, arraso la ciudad… ¡Ah, once frotes de boronofina!
PIRANDÓN.- Y cuando iba a llegar al duo…, al duo décimo la pierdo… ¡¡Oh!! ¡Pero cómo ha desaparecido esa chiquilla!
El Emir cuenta que cuando iba a darle el primer beso, estando en sus aposentos, comenzó a ver lucecitas rojas delante de sus ojos del metido que le dio en el abdomen. Cuando se repuso vió que saltaba por el balcón a un alcornoque y le perdió la pista.
CHISTES DE ARNICHES NÚMERO 424.
(Acto II, Cuadro II, Escena II.)
PIRANDÓN.- ¡Pero mi hija desprenderse de vuestros brazos para caer en otro alcornoque!
EMIR.- ¿Cómo en otro alcornoque?
PIRANDÓN.- No, he querido decir que huir de vos para lanzarse sobre un alcornoque no me lo explico. ¿Qué iba ganando?
EMIR.- ¡Claro, eso digo yo. ¿Qué iba gananado?, bueno, desaparecida por la espesura del parque, mandé cuarenta servidores que la siguieran… ¡y no dan con ella!… ¡No dan con ella, pero si no dan voy a dar yo con los cuellos de muchos idiotas!
Todo esto estaba también en el original. Suenan dos cañonazos que es la señal de una embajada extraordinaria. Son los emisarios de Tarambana que vienen a negociar las condiciones de paz. Vienen el General Katiza y el Coronel Karrea.En el original eran los emisarios de Rodenia, después lo tacha y son de Zortelia que luego será Tarambana e incluso vemos escrito alguna vez Tarambania. Aquí a Melanio le cambia el nombre a Kapirote que luego será Pirandón.
Les proponen la anexión de dos provincias, pero el Emir les dice que tres. Aceptan. Como indemnización serán 186 millones de cuartelios y el Emir propone 978 millones, que les parece mucho a los de Tarambana, ya que no quieren la ruina de un pueblo primo hermano, son vencedores pero generosos… (También aparece en el original.)
El Emir no da crédito. El general Katiza se lo cuenta:
HISTORIAS DE ARNICHES NÚMERO 152.
(Acto II, Cuadro II, Escena IV.)
GENERAL KATIZA.- Pues claro que somos vuestros vencedores, Grandeza Serenísima. Vuestro General puede deciros que si no hubiera sido por que le quitó una motocicleta a un cartero, estaría a estas horas prisionero con su ayudante, como lo está todo vuestro ejército que al empezar la batalla salió corriendo y ha dejado a los gamos en ridículo. Fue una desbandada vergonzosa hasta que al fin se rindieron a discreción.
Pirandón reconoce su derrota y lo explica:
PIRANDÓN.- Tenéis razón, señor, para enfadaros, pero mi error es explicable. Haceos cargo. Estas guerras modernas, aturden… desconciertan… No se ve al enemigo… empieza la lucha y gases ocultantes, gases asfixiantes, gases mareantes… Yo veía correr a unos para arriba… a otros para abajo… ¡Y claro… yo ya no los conocía!… no sabía si eran los míos o los contrarios. No sabía si era un día de batalla o un domingo de Carnaval… y naturalmente, cuando vi que todos desaparecían unos tras otros pensé: “pues esto es que hemos vencido”. Y en último término si no hemos vencido me dije: “Ya me la dará Katiza” –pensaba yo- ¡y a ver si no la está dando!
El Emir le condena a muerte y el General Katiza pide clemencia. En ese momento llega Fieralina y abraza a su padre, el General Katiza.
El Emir pide explicaciones y Fieralina se lo cuenta todo.
Salen Novaya e Ibrahim y explican que la acción de Fieralina fue la más noble que se podía hacer para salvar a Novaya. Minarete se presenta también. El Emir decide dar tres penas de muerte a Pirandón.
(Acto II, Cuadro II, Escena VI.)
GENERAL KATAIZA.- No se hable aquí de muerte, Grandeza. Donde vive el amor, no pueden vivir sino la alegría y la paz. Mi hija y la del General Pirandón se casarán el mismo día. Lo impongo como vencedor.
Mensaje número 850: “Donde vive el amor, no pueden vivir sino la alegría y la paz. No se hable aquí de muerte.” Excelente final para tanta batalla.
Kapolio es acusado por Dolores de no querer reconocerle dos hijos que ha tenido con ella, tres con Kobea y cuatro con Lilaila. No es un eunuco.
El Emir, engañado por todos, decide abandonar el reino. Le despiden con vítores. El General Katiza, aprovecha el desfile que tenía preparado para el Emir, como regalo para las dos bodas.
Fin de la obra.
En el original, el General Katiza también obliga a perdonar a Melanio (Pirandón) que en ese momento se llama Kapirote, y que además los dos pueblos serán unos solo a partir de ahora. Kapirote está encantado y pide volver a Europa a aprender más estrategia. El Emir le dice que no y que solo le falta llamarle “el tonto de Kapirote”. Él, para reivindicarse, llama a las amazonas, que le rodean muy mimosas y se pregunta: “¿Quién es ahora el tonto de Kapirote?”
A renglón seguido hay una carta a máquina, de Joaquín Abati para Carlos Arniches, en la que le comenta lo que el cambiaría. Ya aparece el nombre de Pirandón o Pindongo para el General Melanio.
Hace sugerencias para que Minarete se vista de Marino, y se hace. También para que jueguen a las cartas las Odaliscas, y se hace. Sugiere que Reditonio diga algo sobre “la estabilidad de la peseta” y pone entre paréntesis (si lo dejan decir).
Sugiere aligerar el segundo acto, introducir a Minarete en el Harem de alguna manera… (Al final lo disfrazan de Odalisca…)
Presuponía que uno de los uniformes de Minarete sería el de aviador y que podría llegar a raptar a Zulika (Fieralina en la versión final), pero no se llegó a hacer.
También sugería que Minarete se convirtiese en Eunuco, cosa que no se llegó a realizar.
Finaliza la carta con la petición de reunirse un par de tardes para concluir el trabajo.
No hemos encontrado un solo texto de los cantables.
Gracias a los estudios de Celsa Alonso González (80) conocemos que la obra fue una zarzuela bufa en dos actos. El Heraldo titulaba su crónica “La princesa Tarambana ha hecho una alegre tarambanaza y echado las piernas por alto”. La obra era una mezcla de zarzuela, opereta y vodevil arrevistado y once cuadros. Pertenece a su Etapa Política.
El día del estreno, los autores se dieron cuenta de que había que aligerar texto, cosa que se hizo esa misma noche, siendo muy aplaudida al día siguiente. Se eliminaron frases que no eran correctas en esta sátira mordaz.
MENSAJES DE ARNICHES
MENSAJE NÚMERO 845: No ha tardado mucho Arniches en meterse con los señores Ministros. “A un ministro no se le puede exigir noticias muy verdaderas”. Así comienza la obra.
MENSAJE NÚMERO 846: La Convención de Ginebra está formada, para los autores, por naciones “dignas”, y para ser considerada como tal, se debe conquistar algo de una nación vecina. (Se ha subrayado lo que se eliminó para la segunda representación.)
MENSAJE NÚMERO 847: En el paralelismo que Arniches está haciendo con la política española nos indica las intrigas que se estaban dando para cargarse al cabeza de gobierno, como una práctica habitual. (El diálogo subrayado fue eliminado para la segunda representación.)
MENSAJE NÚMERO 848: Nueva alusión a la política y a la vigencia de la Constitución. La sorpresa de Fieralina nos indica la sorpresa de los creadores del libreto.
MENSAJE NÚMERO 849: Interesante adelanto de 90 años en la aparición de una medicación que ya se buscaba entonces. Arniches estaba al cabo de la actualidad de los intereses de la ciencia.
MENSAJE NÚMERO 850: “Donde vive el amor, no pueden vivir sino la alegría y la paz. No se hable aquí de muerte.” Excelente final para tanta batalla.
MENSAJE NÚMERO 851: Arniches rescata de sus obras de juventud a un Ministro de Injusticia, al de Comadreo, al de Intolerancia y al de Camorras. Ya los empleó en su obra “La verdad desnuda” (1888). Entonces llamó al juez don Infundio, al fiscal don Chanchullo y al abogado defensor don Compadrazgo. Es una nueva ocasión en la que Arniches denuncia la corrupción política en España.